Pero bueno, tenía que esperar seis meses más y no se pudo. Pasó las fiestas con su familia, yo con la mía en Quillota, y la verdad es que estamos bastante lejos, pero seguramente nos vamos a juntar en las semanas que entran, cuando estemos más tranquilos y pase la pretemporada, para comer un asado y pasar más tiempo juntos.